andrea cichitti

 Qué te inspiró a escribir “Mujeres que florecen a través de sus heridas” y cómo fue el proceso de recopilar las historias de estas diecisiete mujeres?

Me inspiró escribir “Mujeres que florecen a través de sus heridas” el proceso de sanación tan profundo que supuso para mí visibilizar mis propias heridas, darle protagonismo como herramienta de superación. El proceso fue muy fluido, en todo momento escuché tanto a cada mujer que fue desnudando su alma, como a mí misma. Respetando momentos de silencio y retirada, intentando que el proceso fuera orgánico para ambas, sin presiones. Como terapeuta holística siento que la narrativa de estos relatos puede ser una fuente poderosa de sanación.

Dada tu experiencia como terapeuta holística, ¿cómo crees que la narrativa de estos relatos puede ayudar a las personas a sanar sus propias heridas emocionales y espirituales?

Imagina que te haces una herida profunda y en lugar de limpiarla y curarla solo la tapas. Esa herida no se ve, sin embargo por dentro supura y duele. Llega un momento que o la atiendes, destaparla y comenzar un proceso de curación, o de lo contrario, podría volverse más dañina, corriendo el riesgo de comenzar a enfermar otras partes de tu cuerpo. 

La experiencia de décadas estudiando y trabajando con la emocionalidad y espiritualidad de las personas me ha demostrado la importancia de poner en palabras las experiencias que hemos vivido. La narrativa de estos relatos ofrece a las personas la oportunidad de destapar sus propias heridas, ver la profundidad o gravedad que realmente tienen y comenzar un proceso de sanación. Al leer sobre las luchas y triunfos de otras personas,  se crea una conexión emocional que puede ser profundamente terapéutica. Este acto de compartir y escuchar no solo valida nuestras propias experiencias, sino que también nos ofrece el valor y la fortaleza para enfrentar nuestras propias heridas y sanarlas desde adentro. 

Al trabajar con temas tan delicados y personales como el abuso y la violencia, ¿cuáles fueron los mayores desafíos que enfrentaste al escribir y compilar estas historias?

Los mayores desafíos que enfrenté fueron asegurarme de que cada mujer que confío en mí para compartir su vida, sus traumas y experiencias a veces tan desgarradoras, sintiera en todo momento mi respeto, y la genuina motivación detrás de mi deseo de contar su historia. Fue crucial transmitirles mi empatía, compasión y resiliencia. Necesitaba asegurarme que supieran que no estaban solas y que sus historias eran tratadas con la máxima sensibilidad y cuidado. Crear un espacio seguro y comprensivo para ellas, donde pudieran expresarse libremente y sentirse sostenidas fue fundamental para el proceso. 

En tu opinión, ¿qué papel juega la vulnerabilidad en la sanación y cómo se refleja esto en los relatos de tu libro?

La vulnerabilidad nos permite conectarnos con nuestra humanidad y con los demás, en un nivel más profundo y auténtico. Es esencial en todo proceso de sanación.  Cuando permitimos que nuestras heridas y emociones más íntimas salgan a la luz y las observamos, les damos ese espacio imprescindible para sanarlas. 

En los relatos de mi libro, esta vulnerabilidad se refleja en la valentía de las mujeres que compartieron sus historias.  Al desnudar sus almas y hablar de sus experiencias más dolorosas,  demostraron una fortaleza increíble. Esta apertura no solo les ayudó a sanar a ellas, sino que también ofrece a los lectores un poderoso ejemplo de cómo la autenticidad y la honestidad pueden ser caminos hacia la superación y la resiliencia. 

A lo largo de tu carrera has explorado muchas formas de terapias energéticas y emocionales. ¿Cómo influye tu formación en estas áreas en tu enfoque de la escritura y en la creación de “Mujeres que florecen a través de sus heridas”?

Mi formación como terapeuta influye en mi enfoque de la escritura y creación de “Mujeres que florecen a través de sus heridas” por las enseñanzas que me han permitido ver a las personas de manera holística, entendiendo que sus experiencias, emociones y energías están intrínsecamente conectadas. Al escribir, aplico esta perspectiva integradora, buscando no solo narrar las historias de las mujeres, sino que también captar la esencia de sus procesos de sanación y transmitir estas experiencias de manera que puedan resonar y ayudar a sanar también a lectoras y lectores.

En los procesos de acompañamiento, utilizo técnicas de escucha activa, empatía y conexión emocional, herramientas que fui aprendiendo a lo largo de mis años de formación y ejerciendo como terapeuta holística, buscando siempre crear un espacio seguro y respetuoso. Tejiendo puentes entre la sexualidad, el amor y la consciencia mediante la respiración, la expresión corporal, verbal, emocional y espiritual.

Esta sensibilidad y compasión que he ido desarrollando, me permiten abordar temas delicados ofreciendo intimidad y seguridad para que las personas se atrevan a profundizar en lo que han vivido y experimentado.

¿Cómo describirías el impacto que esperas que tenga tu libro en los lectores y en la sociedad en general?

Espero que mi libro tenga un impacto transformador tanto en las personas que lo lean, como en la sociedad en general. Deseo que cuando se sientan identificadas con alguno de los relatos, encuentren consuelo, esperanza y una sensación de conexión al descubrir que no están solas en sus luchas, que otras personas pasaron por experiencias similares, y lograron superarlas y volver a comenzar. Mi anhelo más profundo es que las historias inspiren a otros a enfrentar sus propias heridas con valentía y a iniciar su proceso de sanación.

A nivel social, aspiro a que el libro contribuya a una mayor comprensión y empatia hacia quienes han vivido experiencias traumáticas, abusos o  dolorosos desafíos. Al visibilizar estas historias, quiero fomentar un diálogo más abierto y compasivo sobre temas que a menudo se mantienen en la sombra. Mi objetivo es que este libro sea un catalizador para el cambio, promoviendo una cultura de resiliencia y apoyo mutuo donde las heridas puedan transformarse en fuentes de fortaleza y crecimiento.

La autora posando con su obra

¿Podrías compartir algún testimonio o reacción de las mujeres que participaron en tu libro y cómo se sintieron al ver sus historias publicadas?

Es maravilloso,tener la oportunidad de compartir mi historia en el libro de Andrea…Es importante recordar  que siempre se puede volver a empezar y que cada mujer tiene la fuerza para superar cualquier obstáculo…felicidades por la valentía y por inspirar  a otras mujeres que juntas podemos!!! “Alhelí”

 Siento emoción, por ser una de las protagonistas de este libro y más de la mano de Andrea, es una experiencia que nunca jamás pensé vivir, contar las cosas vividas te moviliza porque algunas de ellas tenía olvidadas, y al comenzar a recordarlas emergieron emociones muy fuertes, a su vez me sirvió para asumir mi pasado. Es maravilloso ser parte de este proyecto. Es una emoción y alegría a la vez ser parte de algo que quedará por siempre grabado en esta vida. Gracias, gracias por permitirme participar. “Jazmín” 

Personalmente me impactó leerlo, estuve unos días tristes y llorando mucho. 

No es lo mismo contarlo que leerlo reflejado en un libro y saber que esa persona de la que habla eres tú. También he sacado cosas positivas y es que puedo con todo lo que se me presente en la vida , con mucho amor y valorándome siempre. “Amapola”

Andrea ha sido el canal y el medio para darme el espacio, para darme protagonismo, para darle la voz y la visibilidad que merece mi relato, tanto para mi proceso de duelo como para todas aquellas personas que puedan leerlo y les pueda inspirar.

Verlo escrito en un libro, sabiendo que llegará a manos de miles de personas, es abrumador y a su vez siento atisbos de justicia (entre lágrimas). Decir que he comenzado a escribir estás líneas en primera personal del plural y al releerlo decidí hacerlo en primera persona del singular. 

Es cuando entonces me escucho, y soy consciente de que espero un reconocimiento del exterior, cuando es de mi misma de donde tiene que surgir, con valor y mucho respeto. Madreselva. Encontré en mi historia a esa mujer valiente, es muy fuerte leerlo, te diría aunque parezca mentira más que contarlo.

No me salen las palabras, la emoción puede más, anoche le dije a “Amarylis” que fue muy lindo nuestro encuentro, sentí que a pesar de ser mi historia vos la escribiste con mucha ternura y delicadeza, además de respeto. Voy a estar eternamente agradecida por la puerta que abriste en tu corazón. ¡Gracias por ayudarme a encontrarme! Amarylis

¿Qué mensaje te gustaría transmitir a aquellas personas que están atravesando momentos difíciles y buscan la manera de transformar su dolor en poder y esperanza?

Mi mensaje es absolutamente esperanzador, es invitarlas a buscar ayuda para atravesar esas experiencias que han podido dejar profundas huellas de dolor, angustia, vergüenza, desconsuelo y que comprendan la importancia vital que supone enfrentarnos a lo que hemos vivido, ponerle nombre y voz.

Solo al reconocer y aceptar nuestras heridas podemos comenzar a sanarlas y transformarlas en fuente de poder y esperanza. No están solas en este camino; hay recursos, profesionales y comunidades dispuestos a apoyarlas en sus procesos de sanación y crecimiento. 

Creo fervientemente que existe una herramienta tan poderosa que es capaz de revertir cualquier situación: “EL AMOR”

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