¿Cómo nació la idea de escribir “Las tres guías”?
Solo quiero aportar mi granito de arena en la investigación del cáncer infantil. Acompaño a los niños una tarde a la semana en el hospital, pero eso no es suficiente. Sin dinero no hay investigación y sin ella no hay cura.
¿Por qué decidiste dedicar la novela a los niños y adolescentes que luchan contra alguna enfermedad?
Hago lo que me gustaría que hicieran por mi si estuviera en su lugar. Gracias a Dios, yo no sufrí ninguna enfermedad en mi juventud y ayudar es mi forma de agradecerlo. Para ello, y por suerte, he contado con el apoyo de algunos famosos que han querido escribir unas palabras de ánimo en el prólogo (entre ellos Rodolfo Sancho, mi actor español favorito).
¿Qué mensaje esperas transmitir con esta historia?
Que siempre siempre hay un buen motivo para luchar, aun en las condiciones más adversas. Hay que tener muy claro que nuestra mente tiene un poder descomunal y el ser humano es derrotista por naturaleza ante los grandes problemas.
Es importante saber que según afrontemos la enfermedad, esta nos tratará de un modo u otro. Hay decisiones que nadie puede tomar por nosotros.
Como reza una de mis frases favoritas “Si luchas, puede que pierdas. Sino lo haces… ya has perdido.”
¿Cómo fue el proceso de investigación para abordar la enfermedad de los Tres Lamentos en la trama de la novela?
Es algo muy gratificante. Aprender de un tema que tanto te atrae y saber que puedes ayudar a algunas familias es maravilloso.
La investigación es algo que engancha. Descubrir cosas que poca gente sabe hace que te valores y sientas especial. Algo que te da mucha fuerza.
De hecho, justo ahora estoy en pleno proceso de investigación para mi próxima aventura.
¿Cómo describirías a Nakache, el protagonista de la historia?
Nakache es la clase de héroe con la que todos hemos soñado ser de pequeños. Alguien positivo y crecido ante el peligro.
¿Qué papel juega la confianza en uno mismo en la trama de la novela?
La confianza en un mismo es una de las armas más poderosas que puede tener una persona. Con ella se puede llegar a conseguir cosas verdaderamente increíbles.
¿Por qué elegiste el título “Las tres guías” para la novela?
El objetivo de Nakache es conseguir la cura para la enfermedad de Nunteri, una niña de su pueblo que está muy enferma. La ansiedad, el miedo y la tristeza han invadido su joven corazón.
Cada una de las tres guías puede curar uno de esos males, pero no esperéis una aventura sencilla, pues no lo es.
¿Cómo fue la experiencia de publicar un libro cuyos beneficios están destinados a la investigación del cáncer infantil?
Para mi es una de las experiencias más gratificantes que he tenido, aunque aun estoy lejos de poder hacer esa donación que tanto ansío. Invertí mucho dinero y me va a costar ver los beneficios. Es mi primer libro y la gente no me conoce, así que seguiré como Nakache: decidido y con la mirada al frente.
¿Cuál fue el mayor desafío que enfrentaste al escribir “Las tres guías”?
Supongo que el mismo que ha sufrido cualquier persona al comenzar a escribir. Pensar en si serás capaz o no de conseguirlo.
Al final te das cuenta de que cuando de verdad pones empeño, paciencia y pasión en hacer algo, muy pocas veces puede salir mal.
¿Qué consejos le darías a alguien que quiera escribir una novela con un propósito solidario similar al de tu libro?
Aunque no lo creas, es muy difícil vender libros a personas que no te conocen de nada, sean para fines solidarios o no. Además, es importante conocer la famosa frase “nadie es profeta de su tierra”. Es una experiencia increíble, pero no todo es tan bonito. Hay que trabajar mucho y estás tu solo. Todo depende de varios factores: los contactos que tengas, el tiempo que le dediques y como no, también de la suerte.
¿Tienes algún personaje favorito en la historia?
Es evidente que todo el mundo se quedaría con Nakache, pero si tuviera que elegir otro, sin duda me quedaría con Sakari, la “tejedora de sueños”. Ella es especial…
¿Cuál es tu próximo proyecto literario y de qué trata?
Es otra aventura, otra época. Sueño con hacer algo grande en favor de la investigación del cáncer infantil, tanto que me he visto obligado a dejar un poco de lado otras aficiones para centrarme en cargar mi pluma con la tinta que necesito.
Luchar por ello es mi gran reto y conseguirlo: mi mayor ilusión.
“Que la ansiedad y la tristeza jamás encuentren a tu corazón, ni el miedo aprenda su lengua.”
Carlos Vicuña Montalbán